PROBLEMAS DEL EJE HIPOTÁLAMO-HIPOFISARIO (H-H)

This page is part of the Spanish version of the PanCare PLAIN summaries about late effects and recommendations for long-term follow-up care for survivors of childhood, adolescent, and young adult cancer. Click here, to visit the English PLAIN summaries.

Problemas del eje hipotálamo-hipofisario (H-H)

El cerebro humano es muy complejo y tiene muchas funciones. Por ejemplo, el cerebro nos permite movernos, hablar, pensar y sentir, y controla los procesos que ocurren dentro del cuerpo.

El hipotálamo y la hipófisis son dos partes importantes del cerebro que controlan varios procesos del organismo. La función principal del hipotálamo es indicar a la hipófisis cuándo debe producir hormonas. A continuación, las hormonas viajan por el torrente sanguíneo hasta los distintos órganos, indicándoles qué deben hacer.

Las cinco hormonas principales producidas por la hipófisis son:

  • Hormona del crecimiento (GH), necesaria para el crecimiento normal, la formación de masa muscular y el bienestar general.
  • Hormona estimulante de la tiroides (TSH), que la tiroides necesita para funcionar con normalidad.
  • Hormona luteinizante (LH) y hormona foliculoestimulante (FSH), ambas importantes para la fertilidad y el desarrollo sexual.
  • La hormona adrenocorticotropina (ACTH), necesaria para hacer frente al estrés fisiológico (por ejemplo, infecciones, ruidos fuertes, temperaturas frías/calientes).

Juntos, el hipotálamo y la hipófisis se denominan eje hipotalámico-hipofisario (H-H). Los daños en el eje H-H pueden hacer que la hipófisis deje de producir hormonas (en cantidad suficiente), lo que también se denomina deficiencia hormonal. La deficiencia hormonal puede provocar problemas en el eje H-H, como problemas de crecimiento o de fertilidad.

¿Tengo mayor riesgo de padecer problemas del eje H-H?

Cualquier persona, incluidas aquellas que nunca han recibido tratamiento para el cáncer, puede desarrollar problemas del eje H-H. Sin embargo, algunas enfermedades y tratamientos pueden aumentar el riesgo de padecer problemas del eje H-H en etapas posteriores de la vida.

Las siguientes afecciones médicas pueden aumentar el riesgo de problemas del eje H-H:

  • Un tumor cerca o dentro del eje HH.
  • Hidrocefalia, cuando se acumula demasiado líquido en el cerebro, que puede haber sido tratada con una derivación de líquido cefalorraquídeo.

Los siguientes tratamientos pueden aumentar el riesgo de problemas en el eje H-H:

  • Radioterapia en el eje H-H o en una zona que incluya el eje H-H.
  • Cirugía cerca o dentro del eje H-H.

Puede verificar si ha tenido alguna de estas afecciones médicas o recibido alguno de estos tratamientos revisando su resumen o historial de tratamiento. Si no dispone de un resumen de tratamiento o tiene preguntas al respecto, comuníquese con el hospital donde recibió tratamiento para el cáncer.

Si tiene problemas en el eje H-H, no siempre significa que sean causados por el cáncer o su tratamiento. Los problemas del eje H-H pueden tener otras causas.

¿Cuáles son los síntomas y signos de los problemas del eje H-H?

Existen síntomas y signos que pueden indicar que podría tener problemas en el eje H-H. Aunque es posible que no los presente en este momento, es importante ser consciente de ellos por si llegan a desarrollarse más adelante.

Un síntoma importante de los problemas del eje H-H es sentirse muy cansado. Sin embargo, el cansancio (al igual que otros síntomas y signos) también pueden tener otra causa.

Otros síntomas y signos de problemas del eje H-H pueden variar en función de la hormona que no se produzca:

Deficiencia de GH
  • Problemas de crecimiento en niños que no han completado la pubertad
  • Menos fuerza, necesitando descansar más durante el ejercicio
  • Cambios en la composición corporal, por ejemplo, más grasa alrededor de la cintura
Deficiencia de TSH
  • Problemas de crecimiento en niños que no han completado la pubertad
  • Aumento de peso
  • Pérdida de cabello o cabello fino.
  • Piel seca
  • Estreñimiento
  • Sensación de frío con facilidad
  • Dificultad para concentrarse o prestar atención en la escuela o el trabajo
Deficiencia de LH y/o FSH
En niño/as En hombres En mujeres
  • Ausencia de signos de pubertad a los 13 años (en el caso de las niñas) o 14 años (en el caso de los niños) o ausencia de progreso de la pubertad durante al menos 6 meses.

Los signos de la pubertad incluyen el crecimiento de:

  • vello púbico y axilar.
  • pechos (en las niñas).
  • pene y testículos (en los chicos).
  • Bajo o nulo deseo sexual.
  • Dificultad para tener una erección.
  • Problemas de fertilidad.
  • Cambios de humor.
  • Pérdida de vello facial y/o corporal.
  • Menstruaciones irregulares o ausencia de menstruación.
  • Problemas de fertilidad.
  • Cambios de humor.
  • Deseo sexual bajo o nulo.
  • Pérdida de vello púbico.

Deficiencia de ACTH
Estos síntomas y signos pueden aparecer cuando se está bajo estrés físico o si padece una infección.

  • Tensión arterial baja (que puede provocar desmayos).
  • Náuseas, vómitos o dolor abdominal.
  • Sensación de confusión.

Si presenta alguno de estos síntomas o signos, le recomendamos que contacte con su médico de cabecera o especialista en seguimiento a largo plazo.

Tengo mayor riesgo de padecer problemas del eje H-H. ¿Qué pruebas debo hacerme y cuándo?

Si tiene un mayor riesgo de padecer problemas en el eje H-H, se aconseja visitar regularmente a su especialista en seguimiento a largo plazo/oncólogo pediátrico durante al menos los primeros 15 años después del diagnóstico de cáncer. Transcurrido ese tiempo, usted y su especialista en seguimiento a largo plazo discutirán y decidirán conjuntamente el plan de seguimiento más adecuado para usted (esto se conoce como toma de decisiones compartida). El tipo de pruebas y su frecuencia dependen de su edad.

Antes o durante la pubertad, su especialista en seguimiento a largo plazo puede:

  • Medir el crecimiento y el progreso de la pubertad cada 6 meses.
  • Preguntar si ha experimentado algún síntoma y/o signo de problemas del eje H-H cada año.
  • Realizar un examen físico cada año.
  • Hacer un análisis de sangre para medir las hormonas (T4 libre, TSH, cortisol) en sangre cada año.

Después de la pubertad, su especialista en seguimiento a largo plazo puede:

  • Preguntarle si ha experimentado algún síntoma y/o signo de problemas del eje H-H cada año.
  • Realizar un examen físico cada año.
  • Hacer un análisis de sangre para medir las hormonas (en los varones: testosterona; en las mujeres: estradiol, FSH y LH) en sangre cada año.

También es importante acudir a un endocrinólogo (pediatra) (médico especializado en hormonas) si ha tenido:

  • Un tumor y/o cirugía cerca o dentro del eje H-H
  • Radioterapia craneal en una zona que incluya el eje H-H (Dosis mayor o igual a 30Gy)

¿Qué sucede si tengo un problema en el eje H-H?

Si tiene problemas en el eje H-H, su especialista en seguimiento a largo plazo probablemente lo derivará a un:

  • Endocrinólogo (pediatra) (médico especializado en hormonas y metabolismo).

El endocrinólogo discutirá con usted las diferentes opciones de tratamiento, como podría ser el tratamiento hormonal.

¿Qué más puedo hacer?

Tener problemas en el eje H-H puede ser difícil. Hablar con amigos y familiares puede ser reconfortante, al igual que recibir asesoramiento especializado y/o conectar con grupos de apoyo como organizaciones de pacientes. Para obtener más información sobre el cuidado de su salud mental, por favor consulte el apartado: Problemas de salud mental.

Si tiene problemas en el eje H-H es muy importante llevar un estilo de vida saludable. Cuidar de su salud mental puede ser beneficioso. Incluso pequeños cambios en su estilo de vida pueden tener un impacto positivo tanto en su salud física como mental. Para obtener más información sobre cómo adoptar un estilo de vida más saludable, por favor consulte el apartado: Promoción de la salud.

Es importante ser consciente de la posibilidad de desarrollar problemas en el eje H-H, así como de conocer los síntomas y signos asociados. Si tiene alguna pregunta adicional o la información en este folleto le preocupa, debe contactar a su médico de cabecera o especialista en seguimiento a largo plazo.

¿Dónde puedo encontrar más información?

Puede encontrar información adicional sobre los problemas del eje H-H en Internet. Sin embargo, es importante tener en cuenta que esta información no siempre está actualizada o es precisa. Algunas fuentes de información adicional son:

  • Sociedad de Endocrinología: Aquí puede encontrar más información sobre la alteración del sistema endocrino después del cáncer infantil o su tratamiento.

En este sitio web, también puede encontrar más información relacionada con este tema en los apartados:

Por favor tenga en cuenta

Este resumen PLAIN se basa en la guía IGHG* sobre “Disfunción hipotálamo-hipofisaria” [1].

Aunque el grupo de información PanCare PLAIN se esfuerza por proporcionar información precisa, completa y actualizada hasta la fecha de publicación, le recomendamos verificar con su médico o especialista en seguimiento a largo plazo para asegurarse de que este resumen refleje la información más actualizada y relevante para usted.

No debe basarse únicamente en esta información. Es recomendable buscar el consejo de un médico cualificado si tiene preguntas sobre una condición médica específica, enfermedad, diagnóstico o síntoma.

No se ofrece garantía o representación ya sea expresa o implícita, sobre la precisión, confiabilidad, integridad, relevancia o actualización de esta información. La versión en inglés de los resúmenes ha sido producida por PanCare, y no se hace responsable de las versiones traducidas de este resumen en otros idiomas. La versión en español de los resúmenes PLAIN fue realizada por [Grupo de Trabajo de Efectos a largo plazo/SEHOP (Sociedad Española de Hematología y Oncología Pediátricas], y revisada por Mila Ogalla, Young Cancer Survivor y Patient Advocate.

*Grupo Internacional de Armonización de Directrices para los Efectos Tardíos del Cáncer Infantil.

[1] Van Iersel, L. et al. (2022) Vigilancia hipotálamo-hipofisaria y de otros sistemas endocrinos entre supervivientes de cáncer infantil. Disponible en: https://academic.oup.com/edrv/article/43/5/794/6432595